Diré que fue más volar que caminar, desde El Ángel hasta mi deseo cumplido, bancas vacías y bancas con miradas al aire, con esperas, con besos; bancas paréntesis de la ciudad. Fue poniendo lo que encontraba, un número mágico, un edificio recortado en el cielo, otro, una alargada sombra, un retrato borroso, una perspectiva a la que fugarme y la voz, la voz de Alejandro:
Vagar, vagar
Que Hermoso!!!
ResponderEliminarDe alguna forma todo en este mundo es calle y todos nosotros sus vagabundos
Me llena de emoción esuchar la voz de Alejandro una vez más...
Milagros, muchas gracias por compartir estas perlas.
GBo