26 mayo 2010

.. en la rutina del té


Madrid, la casa, me hacen recuperar sin proponérmelo rutinas. Por ejemplo, la de preparar el té que saboreo mientras pongo el pie en el nuevo día. Aparecen los utensilios cuando voy abriendo los armarios de la cocina, los tés que mezclo y las especias: cardamomo, canela, clavo, pimienta y anís estrella. Tanteo las cantidades, escucho el agua para apagarlo justo antes de que rompa a hervir, cronometro los minutos de reposo. Así lo fui perfeccionando y ese cada vez más exquisito sabor era un placer que compartía con Alejandro cada mañana.

Dos veces lo contó en su blog: el 20 de abril de 2007 . Y el 9 de junio de ese año explicó la manera en que el té sobrante servía para unas deliciosas gelatinas: Gelatinas de Riesgo

Así fue el tiempo del cáncer, nos dio para deleitarnos en nimiedades, que quedaron modificadas en su esencia: el placer de las pequeñas cosas.

1 comentario:

  1. Bienvenida de nuevo a Madrid. Espero que tu estancia por México haya sido provechosa... te mando un abrazo fuerte

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